Según explicó el alcalde Mauro Tamayo esta iniciativa con financiamiento municipal, la primera en el país, “busca apoyar y descongestionar la red asistencial hospitalaria ante un eventual colapso del sistema. En la medida que los pacientes de menor complejidad puedan ser atendidos en sus domicilios con cuidados de alto estándar, disminuimos los días camas de los pacientes en los hospitales”.
Para lograr esta atención domiciliaria, el municipio se coordinará con el Hospital San Juan de Dios y el recientemente inaugurado Hospital Félix Bulnes. Además, ya adquirió todos los insumos necesarios, entre ellos 50 catres clínicos y condensadores de oxígeno, y amplió su cuerpo médico con más médicos, kinesiólogos y enfermeros.
De acuerdo a Catherine Almarza, subdirectora de Gestión del Cuidado del Hospital Félix Bulnes “es un aporte importante en este momento de contingencia. Va a llegar un minuto en que pese a que hagamos todos los esfuerzos en los hospitales, tendremos falta de camas para la hospitalización”. Agregó que la iniciativa “permite tener pacientes en sus casas con todos los cuidados que se requieren de médicos, enfermeros y kinesiólogos, y lo mejor de todo es que estarán al cuidado de su familia que es un aporte muy importante”.
En una primera etapa, el proyecto liberará cupos de camas usadas por pacientes con patologías no críticas y distintas al Covid-19 para luego, en una segunda etapa, incorporará pacientes positivos por COVID-19 en condición leve y pacientes también positivos que tuvieron ya su alta médica y que necesitan seguimiento durante su recuperación.