Un grupo de 18 mujeres de Cerro Navia, cosen entre 100 y 300 mascarillas diarias para nuestra comunidad. El municipio les entrega elásticos, hilos y TNT, una tela especial que permite casi un 80% de protección, y ellas las hacen en sus casas.
Ya han confeccionado más de 16.000 mascarillas reutilizables, de las cuáles 14.000 se han repartido en las ferias libres de la comuna, a funcionarios o en las bolsas de mercadería del Plan 80.
Ruby Muñoz (62), supo por la Oficina de Personas Mayores que se necesitaban costureras, y no dudó en avisar a vecinas y conocidas. Contó que las hace en paquetes de 50 y que “teniendo el material podría hacer hasta 200, cuando dejo cocinado el almuerzo del día anterior. Creo que me demoro dos minutos en hacer la mascarilla, mi hija me tomó el tiempo”, y en una “máquina que tiene como más de 100 años, mi marido le puso motor, porque antes era a pie”.
Para la señora Ruby no ha sido difícil. Fue costurera antes de casarse, en una fábrica de confección de pantalones. De hecho, cuando empezó la crisis sanitaria buscó retazos viejos y les hizo mascarillas a su familia y vecinos. “Yo le decía a mi marido que si tuviera que hacerlas gratis, igual las haría, porque es una ayuda social, y me entretengo y como empezaron a pagarlas, bienvenido. He hecho más de mil y me sirve para pagar mis cuentas”, detalló.
A través de un whatsapp esta mujer se contacta a diario con la Municipalidad por el envío de materiales o para avisar que están listas las entregas. Sujey Huenuman (42), también está conectada. Ella se unió a las costureras, porque Ruby le avisó algunas semanas atrás. Sabía que Sujey había estudiado confección y diseño, y ha trabajado en esto toda su vida.
Sujey, a su vez, agradeció la oportunidad en días tan complejos. “No hay trabajos y nos hemos quedado todas detenidas sin entradas de dinero, y nuestros maridos están cesantes, tenemos que movernos de alguna manera”. Aseguró que “ayudar a la comunidad es la primera cosa, porque sabemos lo complicado que es contar con una mascarilla, hay muchos que no tienen trabajo para comprar una. Es una buena idea de la Municipalidad regalarlas, sobre todo a las personas mayores”.
Ambas aseguraron que la mascarilla no basta, hay que quedarse en casa. “Ahora estamos en cuarentena, obviamente se les pide a los vecinos que se queden en casa, si no tienen la necesidad de salir» advirtió Sujey. Algo que corroboró la señora Ruby, pero denunció que “hay muchos vecinos porfiados que igual andan en la calle. A veces coso hasta las 12 de la noche y veo jóvenes en la calle, que andan hasta sin mascarillas, creen que nunca les va a pasar nada, no piensan en sus familias o abuelos”.