Publicado el: 20 agosto 2021

Un día como hoy, 20 de agosto, pero de 1984 llegaron las primeras familias a lo que hoy conocemos como Población Santa Elvira. Ya son 37 años de lucha por dignidad de cada una de las vecinas y vecinos que componen este importante espacio de la comuna de Cerro Navia, los que hoy ascienden a 1.500 personas al ojímetro, como dicen allá.

Carlos Moraga es uno de sus fundadores y además es el presidente de la Junta de Vecinos de la población. Esta es su historia y la de Santa Elvira en su aniversario número 37:

“Hoy nosotros queremos hacernos notar, queremos que sepan que estamos vivos y que somos parte de Cerro Navia.

En 1984 llegamos a Cerro Navia porque fuimos erradicados del campamento El Sauce en Quilicura. Ese campamento tenía alrededor de 30 o 40 años. Lo cambiaban de un lado para otro…

El alcalde de ese tiempo era designado, un coronel retirado del Ejército. Él no nos quería porque nosotros nos oponíamos a la forma de dirigir la comuna y además nos daban poca importancia porque éramos de un campamento. Y cuando pudo, nos echó y nos mandó a Cerro Navia.

Llegamos y se cumplió el sueño de la casa propia, fue muy bonito, pero con muchos problemas. Por ejemplo, ¿qué pasaba con los niños que estudiaban en Quilicura? Tuvimos que movernos y conseguir un bus que los fueran a buscar y a dejar. Nuestros hijos siguieron en ese colegio un año más y después tuvimos que insertarlos en otro lugar.

Cuando llegamos a Cerro Navia nos tratamos de organizar en la medida que podíamos, pero no resultó. Cada uno caminaba con su bandera no más, había que seguir viviendo. Así, poco a poco nos fuimos asentando hasta que surgió una directiva. Fue muy difícil porque traíamos una secuela de desconfianza y desunión. No estábamos preparados para una organización.

Debido a esa desconfianza, una gran cantidad de vecinos volvió a Quilicura porque no se adaptaron. Los que somos más carne dura, nos quedamos. Éramos 300 familias de distintos lados, no solo de Quilicura. También había personas de La Florida que llegaron a parar aquí.

Con el tiempo nos fuimos conociendo, nos fuimos adaptando y había que remar hacia adelante con lo que había. Y aquí estamos.

En estos últimos 4 años que han pasado, con el alcalde Mauro Tamayo se inició un nuevo proceso, algo totalmente diferente. El municipio se acercó a la gente, nos empezó a visitar y logró organizarnos. Eso nunca había pasado.

Antes, en esta población no había pavimento y vivíamos frente a un vertedero que ahora es un parque muy bonito. El entorno cambió, le cambió la cara a nuestro hogar, y ahora empezamos a sentir que tenemos un poco de dignidad.

Cuando se acerca una autoridad y nos pregunta qué es lo que nos gustaría tener para vivir, eso tiene un valor que no lo dimensionábamos porque antes nadie nos preguntó qué queríamos. Éramos una cáscara de nuez en el río, navegando hacia donde fuera.

Ahora sentimos que existimos. Se nos está construyendo una sede, imagínese, nos hemos perdido de tantos programas importantes de la municipalidad por no tener una sede. No hemos podido tener Médico en tu Barrio, por ejemplo, y eso sé que ayudaría mucho a todos.

Se han logrado cosas que eran muy difíciles, que eran un sueño. El alcalde con ojo visionario se dio cuenta de esto y nos empezó a ayudar.

Estoy muy agradecido, sé que siempre se puede más, pero no podemos olvidar en las condiciones que recibió la comuna el alcalde, totalmente quebrada. Él junto a su equipo ha logrado levantar la comuna.

Estoy conforme porque se han conseguido cosas en beneficio de todos. Y hoy como presidente de la Junta de Vecinos de Santa Elvira, trato de hacer lo mejor, dar lo mejor de mí para mis vecinos. Creo que voy a cumplir mi meta cuando se acabe esta pandemia, con la tranquilidad de haber cumplido”.

Carlos Moraga Z.
Presidente de la Junta de Vecinos Población Santa Elvira