144 asistentes a la Caminata por el buen trato en la crianza de niñas, niños y adolescentes
El viernes 02 de diciembre se realizó la Caminata por el buen trato en la crianza de niñas, niños y adolescentes (NNA), organizada por la Oficina de la Niñez, donde asistieron 144 personas en total, de las cuales 115 eran NNA, 13 profesionales de establecimientos educacionales, y 16 profesionales pertenecientes a OPD y lazos, todos de Cerro Navia. En la instancia se hicieron presentes autoridades comunales como el alcalde Mauro Tamayo, y los concejales Sebastián Caiceo y Mario Ferrada.
La caminata inició en la Escuela Cuidad Santo Domingo de Guzmán, finalizando en los jardines municipales sede Del Consistorial, donde hubo juegos inflables, stands recreativos, obra de títeres «Los Secretos», entre otras. El propósito de la actividad era poner en el centro el respeto hacia la niñez, potenciando el enfoque de derechos y un sistema de protección integral para niñas, niños y adolescentes de la comuna.
Las y los participantes iban desde los 6 hasta los 17 años, y cada grupo etario llevaba su propia consigna, las que iban desde frenar la violencia hasta el valor de los estudios de calidad.
Saul Figueroa (17) dirigió la caminata, y expreso que «es importante parar el acoso escolar, también el acoso callejero que viven nuestras compañeras en las calles y liceos, y por último la importancia de la educación».
Tomás González (13) participó en la caminata porque «es importante defender nuestros derechos y frenar todos los tipos de acoso».
El alcalde Tamayo recalcó la importancia de «defender con fuerza el derecho a la educación y a vivir sin abuso, sin acoso y sin violencia».
¿Qué es el buen trato en la crianza?
El Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF) explica que el buen trato consiste en relacionarse con niñas, niños y adolescentes como seres humanos que tienen derechos y no como propiedad de padres, madres o personas cuidadoras. Las personas que tienen a su cuidado a niñas, niños y adolescentes tienen la responsabilidad de protegerlos y formales respetando sus derechos humanos, y por el contrario no deben ejercer maltratos y castigos físicos o humillantes como golpes, azotes, nalgadas, amenazas, gritos, regaños o amenazas.